¡BEIRUT! AMARGA EXPERIENCIA DE UN MARINERO
“habían confiscado toneladas de ácido nítrico de un cargamento el año pasado y los dejaron en uno de los hangares del puerto.
Una fuerte explosión ha sacudido este martes la capital libanesa a las 17:00 horas. La ciudad ha quedado cubierta por una gran columna de humo de color rojizo. Según ha informado la Agencia Nacional de Noticias (ANN), la explosión se originó en un almacén de pirotecnia del puerto de Beirut.
El incendio ha comenzado cerca de los silos de trigo del puerto, en un almacén de explosivos, lo cual ha provocado una fuerte sacudida que ha podido sentirse tanto en la ciudad como en los suburbios. Se han roto ventanas y escaparates a más de cinco kilómetros de la explosión.
“Tardó unos segundos. Era como si una nube estuviera sobre nosotros y luego, unos segundos después, se escuchó el sonido y luego la explosión. Fue intenso. Vi como todos los cristales en las calles, todas las ventanas estaban rotas”, ha contado un testigo a Euronews.
A pocas horas de la explosión, la investigación preliminar del ministerio de Sanidad cifra el número heridos en unos 3.000 y contabiliza al menos 50 fallecidos. Aunque todavía se desconoce el alcance de la explosión, el ministro de Sanidad comunicaba que hay “muchas personas heridas y cuantiosos daños materiales”.
Destrozos en el puerto de Beirut tras la enorme explosión – Derechos de autor Hassan Ammar/Copyright 2020 The Associated Press. All rights reserved.
La segunda onda expansiva, que ha alcanzado varios kilómetros a la redonda, llegaba unos minutos más tarde dejando una situación aterradora. Según lo describen los testigos, la sensación era similar a la que habría dejado una bomba nuclear.
Las calles de Beirut se encuentran visiblemente afectadas, hay coches afectados por la caída de los árboles, cristales rotos y personas heridas en las calles. Además, las oficinas de The Daily Star, uno de los principales medios del país, han quedado dañadas a causa de la explosión.
La periodista local Carol Malouf explica a Euronews que “habían confiscado toneladas de ácido nítrico de un cargamento el año pasado y los dejaron en uno de los hangares del puerto. Se produjo un incendio y luego el ácido nítrico se incendió y eso causó la explosión y el hongo de humo que hemos visto en los videos”.
Hay edificios que sufrieron daños de diversa consideración en un radio de más de dos kilómetros. La explosión se oyó en Chipre, a más de doscientos kilómetros. Por el momento, las autoridades están investigando lo ocurrido y no se descarta que pueda ser un atentado.
Un incidente se ha producido a pocos días de que el Tribunal Especial para Líbano, en La Haya, se pronuncie sobre el asesinato del ex primer ministro Rafik Hariri, en 2005. En este atentado murieron una veintena de personas en el mismo lugar, el puerto de Beirut.
Instalaciones en un estado pésimo, así como salarios extremadamente bajos y atrasados, se mencionan constantemente en los mensajes, que en su mayoría sirvieron como advertencia para los marineros que estaban considerando contratos con la misma compañía.
“Aquellos que trabajaron [en el MV Rhosus] deberían recibir títulos de ‘héroes'”, escribió un marinero en un mensaje obtenido por el canal de noticias Baza, en Telegram. “El barco no tiene cámara de refrigeración para almacenar alimentos e incluso la cabina del capitán no tiene comodidades sanitarias”, reza el mensaje.
“Una amarga experiencia de navegación”
RT se ha puesto en contacto con un exempleado de Teto Shipping, que prestó servicios a bordo del desafortunado barco, y su relato parece respaldar las denuncias de los tripulantes. Semión Nikolenko, quien fue contratado como ingeniero electrónico para la tripulación del MV Rhosus en 2012, cuenta que tanto la embarcación como la dirección de la empresa “no eran buenas”.
“Fue mi primer contrato, mi primera experiencia [navegando], y resultó amarga”, afirmó a RT el marinero, que ahora vive en Crimea. El propietario del barco era un hombre “astuto” que no cumplió sus promesas, recordó Nikolenko.
Aún más alarmante, la nave tenía muchos problemas técnicos, incluido el mal funcionamiento de los radares y problemas con su motor principal. La historia de Nikolenko sugiere que Grechushkin no podría haberse preocupado menos por los problemas, ya que solo financió las reparaciones cuando las autoridades portuarias registraban las deficiencias del barco.
“Hubo frecuentes inspecciones en los puertos europeos, constantes reprimendas, detenciones“, señaló el exempealdo de Teto Shipping.
Nikolenko admitió que la empresa a menudo buscaba resolver cualquier problema con las autoridades portuarias a través de sobornos en lugar de rectificar las deficiencias. Poco antes de llegar a Beirut, el barco había estado confiscado durante dos semanas en Sevilla (España), donde las autoridades portuarias obligaron a la empresa a instalar un generador de respaldo, ya que solo una de las unidades de energía del barco estaba operativa, recordó el marinero.
El hombre, que estuvo más de siete meses en el barco, dejó el trabajo justo antes del desafortunado periplo del MV Rhosus que terminó en el puerto de Beirut.
Viaje sin salida
En 2013, el buque recogió 2.750 toneladas de nitrato de amonio en el puerto georgiano de Batumi para llevarlo Mozambique, pero nunca llegó a destino debido a problemas técnicos. Luego de una inspección por parte del Control del Estado del Puerto, una rama de la Organización Marítima Internacional (OMI), se le prohibió salir del puerto de Beirut.
En ese momento, la tripulación ya se había reducido al mínimo, debido a la naturaleza “peligrosa” de la carga a bordo, señaló Nikolenko.
Un resumen legal de 2015 realizado por el bufete de abogados libanés Baroudi & Associates sugiere que el barco fue prácticamente abandonado tanto por su propietario, que declaró rápidamente a su empresa en quiebra, como por los propietarios de la carga.
El capitán de la nave, Borís Prokóshev y otros cuatro miembros de la tripulación fueron detenidos en Beirut y tuvieron que pasar 11 meses allí antes de que se les permitiera regresar a casa. Prokóshev presentó una denuncia contra el propietario del buque en 2014, en la que aseguró que los marineros se habían quedado sin salario y comida.
Según el capitán, el barco fue retenido por los libaneses por no pagar la tasa portuaria. Sin embargo, cree que fue una medida poco aconsejable. “No sirvió de nada confiscar esta nave. Deberían haberse deshecho de ella lo antes posible”, aseveró Prokóshev al portal Sibreal.org, y agregó que Beirut también podría haber eliminado de manera segura la carga peligrosa. “Si nadie reclama el cargamento, entonces no le pertenece a nadie”, aseveró Prokóshev.
De acuerdo con Baroudi & Associates, la carga peligrosa del barco se trasladó a una instalación de almacenamiento en el puerto, donde aparentemente permaneció todos estos años. En cuanto al destino del barco, que fue registrado por última vez por el rastreador de Marinetraffic en el puerto de Beirut cerca del epicentro de la explosión, podría haberse hundido mucho antes de que el lugar fuera devastado por la explosión.
“Tenía un pequeño agujero en el casco. Tuvimos que bombear agua en algunas oportunidades. Sin la tripulación, no había nadie que lo hiciera”, indicó el capitán.
Violaciones por parte de las autoridades portuarias
La carga del barco siguió siendo una preocupación para las autoridades libanesas durante todos estos años. Los funcionarios de seguridad estaban al tanto del peligro que representaba el nitrato de amonio y exigieron que las autoridades portuarias lo retiraran meses antes del desastre, según han afirmado medios locales. Pero las supuestas imágenes del sitio de almacenamiento compartidas en las redes sociales aparentemente muestran grandes bolsas llenas de toneladas de fertilizante apiladas en un almacén de aspecto endeble.
Según informes no oficiales, alguien decidió almacenar fuegos artificiales junto a la bodega donde se guardaba el fertilizante, y durante un trabajo de soldadura en la puerta del lugar ocurrió la explosión masiva de nitrato de amonio. Sin embargo, el Gobierno libanés ha descartado esa versión y ha prometido revelar los resultados de su investigación dentro de “cinco días”.
Fuente.RT
C.M (FPP)