CHILE: EL TRAIDOR DE GABRIEL BORIC SE SACA LA MÁSCARA
LIBERTAD A TODOS LOS PRES@S POLÍTIC@S SIN EXCLUSIÓN. IMPUNIDAD JAMÁS
Han pasado tanto sólo tres días de la primera vuelta presidencial donde José Antonio Kast del ultraderechista Partido Republicano llegó en primer lugar, y ya Gabriel Boric, candidato del Frente Amplio y el Partido Comunista inicia la traición que se esperaba y propia de todo los proyectos progresistas.
Sin que nadie lo presionara, y sólo como consecuencia de la desesperación de perder la elección presidencial, el progresismo y Boric no sólo han renunciado a muchos de los “principios” que sustentaron la construcción de su alternativa, que lograron “entusiasmar” a la “izquierda” sino también han hecho propio el discurso más reaccionario de la derecha fascista ligado al combate de la delincuencia, el respeto del orden público, el respeto a la ley, la condena a los actos de violencia incluyendo la condena a la violencia popular como forma de hacer política, el respeto al Estado de Derecho, ahora se suma la lucha antisubversiva y la validación de la prisión política como instrumento efectivo del Estado opresor.
Si estamos en lo que los analistas políticas llaman “un nuevo ciclo” donde la constitución de Pinochet-Lagos y el neoliberalismo llegan supuestamente a su fin y donde se pudo instalar con todas sus limitaciones y renuncias una Convención Constitucional es porque el pueblo, la ciudadanía en su conjunto y en forma resuelta se alzó, se rebeló y ejerció masivamente tanto la movilización popular como la violencia popular. El estallido fue eso y fue el más claro repudio al conjunto del modelo, régimen y sistema impuesto en base a la ilegitimidad emanado de la constitución del 80 constitución que toda la izquierda reformista validó mediante su participación en todas las elecciones desde 1990 y su participación en todas las instituciones del Estado nacida de ella que incluye también al Frente Amplio.
Debido a esta confrontación entre el Estado y el pueblo, entre la clase política / partido del orden y la ciudadanía, el Estado respondió con el genocidio, los crímenes contra la humanidad, el terrorismo de Estado, las violaciones a los derechos humanos, la mutilación de personas, el asesinato de muchos, la aplicación de la tortura y la instalación de la prisión política en forma masiva y a lo largo de todo Chile. Como ha sucedido a lo largo de la historia patria cada vez que la clase dominante requiere recuperar las riendas, y posterior a los crímenes que esta comete con dicho objetivo, se produce un nueva pacto interburgués y los crímenes quedan en la más absoluta impunidad para que el modelo siga su curso y larga vida y los buenos negocios se sigan desarrollando.
Esto fue lo que ocurrió en Chile. En medio del estallido social, Gabriel Boric y el Frente Amplio actuaron como los articuladores del “gran” acuerdo interburgués que permitió salvar al conjunto del sistema y evitar la caída libre del gobierno de Piñera y derrumbe de la clase política. Eso ocurrió el 15 de noviembre de 2019. Pero como dice el dicho popular “los compromisos se honran”.
Como decíamos al inicio, la posibilidad que Boric pierda la elección ha hecho que este asuma el discurso fascista del la ley y el orden como propio. Sus últimas declaraciones en las cuales cuestiona la exigencia del amplio movimiento de los derechos humanos en cuanto a liberar a todos los presos políticos sin exclusión ni distinción mediante la promulgación de una ley de indulto Boric lo ha puesto en duda.
Nuevamente la traición se instala contra aquellos que lucharon y quienes negociaron continúan con la represión. El estudio del “casa a caso” de los presos políticos, que más de 2500, y las últimas declaraciones sólo lo retrata de pie a cabeza y viene a ratificar la máxima que dice que entre fascismo y progresismo no hay mucha diferencia.
Pero esta actitud traidora y rastrera es propia de todos los proyectos progresistas. Si el gobierno de Lula y de Dilma mantuvieron el aislamiento prolongado atentatorio de todos los tratados de derechos humanos y prisión política en Mauricio Hernández Norambuena, Comandante Ramiro del FPMR, y si Pedro Castillo permitió la desaparición del cuerpo de Abimael Guzmán, Presidente Gonzalo, y permitió sin reparos que los futuros presos y presas de la guerra interna que fallezcan encarcelados corran la misma suerte, que Boric traicione a los presos de la revuelta no es novedad sino causa la misma indignación que en todos los casos anteriores.
Claro para poder ganar las elecciones debe ejercer en plenitud la prostitución política, ajeno a todo principio, asumir los valores a lo Graucho Marx. El travestismo político claramente es lo suyo. Es un fiel seguidor de Judas y un buen alumno de Pilatos. Como reza el dicho popular “no hay peor astilla que la del mismo palo”. Boric es una rata de dos patas.
Para seguir leyendo
Boric: “no es aceptable el indulto para todos”
Para escuchar y no olvidar
