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![\"\"](\"https:\/\/kaosenlared.net\/wp-content\/uploads\/2021\/02\/hasel-free-1.jpg\")
\r\n23 FEBRERO 2021
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\r\n23 FEBRERO 2021
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Pedro S\u00e1nchez se present\u00f3 ante los medios de comunicaci\u00f3n tan guapo y apuesto como le gusta a sus ministras \u2013Margarita Robles: \u00abTenemos un Rey guap\u00edsimo y un presidente del Gobierno m\u00e1s guapo todav\u00eda\u00bb\u2013, pero con el gesto torcido por las manifestaciones \u2013y los disturbios\u2013 producidas en Espa\u00f1a por la detenci\u00f3n y el ingreso en prisi\u00f3n del rapero Pablo Has\u00e9l. Como si quisiera zanjar el debate afirm\u00f3 que \u00aben una democracia plena, y Espa\u00f1a es una democracia plena, resulta inadmisible el uso de cualquier tipo de violencia\u00bb. Una frase que puede convertirse en lapidaria, para \u00e9l y para Espa\u00f1a.<\/p>\r\n
Para empezar, la inmediata frase anterior dinamit\u00f3 por completo tan severa afirmaci\u00f3n: \u00abLa democracia espa\u00f1ola tiene una tarea pendiente, que es ampliar y mejorar la libertad de expresi\u00f3n\u00bb. \u00bfSe puede ser una democracia plena si hay que \u00abampliar y mejorar la libertad de expresi\u00f3n\u00bb? Democracia, dif\u00edcilmente, por la inexcusablemente \u00edntima relaci\u00f3n de \u00e9sta con la libertad de expresi\u00f3n; pero democracia plena, imposible.<\/p>\r\n
Si Pedro S\u00e1nchez ha sido el primero en quebrar su propia afirmaci\u00f3n, antes incluso de nacer, el caprichoso destino no ha sido menos implacable, pues el final de la frase presidencial, \u00abresulta inadmisible el uso de cualquier tipo de violencia\u00bb, fue brutalmente apu\u00f1alado, incluso con ensa\u00f1amiento, por el fallecimiento por covid-19 del general Rodr\u00edguez Galindo. General de la Guardia Civil condenado por el secuestro, el asesinato y las torturas que sufrieron Lasa y Zabala, pero que, tan solo, cumpli\u00f3 cuatro a\u00f1os de prisi\u00f3n y conserv\u00f3 sus medallas y condecoraciones hasta el fin de sus d\u00edas. Un general que fue, casualidades \u2013de nuevo\u2013 del destino, consejero durante meses de la mencionada ministra, Margarita Robles, que tan embelesada ha quedado por la belleza presidencial y mon\u00e1rquica.<\/p>\r\n
No se trata de un caso menor ni de una cuesti\u00f3n tangencial ni mucho menos de un asunto aislado. El conocido torturador Billy el Ni\u00f1o falleci\u00f3 en la cama. Como el dictador Francisco Franco. Y como parece que fallecer\u00e1 el rey em\u00e9rito, Juan Carlos, o el torturador y coronel de la Guardia Civil Manuel S\u00e1nchez Corb\u00ed. Todos ellos, salvo el general Galindo, que pas\u00f3 un tiempo m\u00ednimo \u2013y prudentemente decorativo\u2013 en prisi\u00f3n debido a la presi\u00f3n medi\u00e1tica, son delincuentes que quedaron exonerados de pagar por sus cr\u00edmenes y tuvieron el reconocimiento y el apoyo de las m\u00e1s altas instituciones del Estado.<\/p>\r\n
As\u00ed pues, la realidad, muy alejada de las afirmaciones de Pedro S\u00e1nchez, es que en Espa\u00f1a resulta inadmisible la violencia que va dirigida contra contenedores, escaparates y agentes policiales por parte de minoritarios manifestantes<\/strong> que descargan su frustraci\u00f3n por una situaci\u00f3n claramente injusta y asim\u00e9trica que se vive en el pa\u00eds \u2013seg\u00fan fuentes policiales, los grupos violentos ascendieron a un 3% en Madrid, con 40 de 1.200, y un 14% en Barcelona, con 250 de 1.700\u2013, porque la violencia de aporrear, ahogar, electrocutar, despellejar y asesinar resulta t\u00e9tricamente amparada cuando los ejecutores son agentes policiales o parapoliciales<\/strong>. Como cuando una mujer pierde un ojo, como ha ocurrido en el caso de las manifestaciones por Pablo Has\u00e9l, o cuando se emplea munici\u00f3n real en Linares contra manifestantes o cuando se dispara contra migrantes, como sucedi\u00f3 en el Tarajal, donde hace siete a\u00f1os fallecieron al menos quince migrantes ahogados mientras agentes espa\u00f1oles les disparaban.<\/p>\r\n La brutalidad policial no es, por tanto, inadmisible en la Espa\u00f1a de Pedro S\u00e1nchez, ni la Espa\u00f1a de la mayor\u00eda de los gobernantes, lo que por s\u00ed mismo dificulta que \u00e9sta sea una democracia plena, puesto que, como el mismo presidente afirma, \u00aben una democracia plena resulta inadmisible el uso de cualquier tipo de violencia\u00bb. De cualquiera.<\/p>\r\n Dejando a un lado que, en el caso de Pablo Has\u00e9l, ni se manifiestan, por temor u otras cuestiones, todos aquellos que se oponen a la condena ni todos los que se manifiestan son violentos, cabe preguntarse ante esta nueva muestra ciudadana de desafecci\u00f3n si existe otra alternativa. Si Espa\u00f1a dispone de una herramienta que permita a los ciudadanos realizar cambios a distintos niveles, estructuras y poderes sin recurrir a las manifestaciones y a las acciones violentas para terminar con la asimetr\u00eda que protege a unos y condena a otros. No lo parece.<\/p>\r\n Como ocurri\u00f3 en el caso de la condena a los l\u00edderes catalanes por delitos que ni siquiera aparecen en m\u00faltiples c\u00f3digos penales europeos, condenas que se asemejan en cuanto a dureza a la que recibieron criminales de guerra durante los a\u00f1os noventa en la antigua Yugoslavia, nos encontramos con protestas ciudadanas tras una resoluci\u00f3n judicial amparada en un c\u00f3digo penal de escasa aceptaci\u00f3n para una gran mayor\u00eda de los ciudadanos. M\u00e1xime teniendo en cuenta que la legislaci\u00f3n espa\u00f1ola parece confeccionada a medida de las \u00e9lites franquistas que, todav\u00eda hoy, mantienen el poder en Espa\u00f1a. Peor a\u00fan, parece que de estas \u00e9lites dependen los encargados de redactar y aplicar las leyes. Preocupante.<\/p>\r\n En el caso de Pablo Has\u00e9l, condenado por sus letras y sus tuits, algunos de ellos realmente incendiarios, nos encontramos con un rapero que es condenado por muchas cuestiones, en algunas ocasiones con justificaci\u00f3n, pero entre ellas por calificar de ladr\u00f3n al rey Juan Carlos I, algo parecido a lo que le sucedi\u00f3 a Valtonyc, el rapero que se ha refugiado en B\u00e9lgica, pa\u00eds que ha negado la extradici\u00f3n a Espa\u00f1a por considerar que las letras de sus canciones estaban amparadas por la libertad de expresi\u00f3n. Letras que en Espa\u00f1a se consideran \u2018terroristas\u2019.<\/p>\r\n Sin embargo, el problema, m\u00e1s all\u00e1 incluso de condenar al rapero por delitos contra la Corona, un delito que, como hemos advertido, no existe en la mayor\u00eda de los pa\u00edses europeos, es que Juan Carlos I no solo es un ladr\u00f3n, sino que es un delincuente m\u00faltiple\u00a0oficioso<\/em>\u00a0porque no puede ser juzgado debido a la inviolabilidad jur\u00eddica. Y no puede ser juzgado porque nos encontramos con un Estado que blinda legislativamente a su jefe de cualquier acci\u00f3n delictiva que cometa, por aberrante que pudiera ser, mientras condena cualquier cr\u00edtica \u2013o insulto\u2013 que pueda recibir, por veraz que pudiera ser. Un problema legislativo que genera no pocas tensiones desde hace a\u00f1os.<\/p>\r\n Se podr\u00e1 demonizar a los manifestantes, sobre todo a los violentos, pero antes de ello deber\u00edamos volver a preguntarnos si los ciudadanos disponen de herramientas para modificar el aparato legislativo y adecuarlo a la realidad social. La respuesta parece negativa. Y si los ciudadanos carecen de una posibilidad efectiva de modificar el aparato legislativo, \u00bfqu\u00e9 opci\u00f3n se les deja si no son las calles para forzar este cambio legislativo? Porque lo cierto es que, aunque la mayor\u00eda de los ciudadanos no est\u00e1n de acuerdo con la violencia, no es menor el porcentaje de ellos que considera que en el trasfondo de la cuesti\u00f3n existe una raz\u00f3n abrumadora a favor de Pablo H\u00e1sel<\/strong>. M\u00e1xime con el rey em\u00e9rito Juan Carlos huido de forma vergonzosa para silenciar los esc\u00e1ndalos corruptos que le afectan. As\u00ed pues, en este caso cabr\u00eda preguntarse qui\u00e9nes son los verdaderos responsables de los disturbios acaecidos, \u00bflos manifestantes que protestan por la condena o los pol\u00edticos que no han modificado la legislaci\u00f3n ni reformado las instituciones judiciales en d\u00e9cadas?<\/p>\r\n Ciertamente, los pol\u00edticos deber\u00edan haber realizado los cambios legislativos necesarios para terminar con la inviolabilidad jur\u00eddica del rey y despenalizar la enorme cantidad de delitos que afectan a la libertad de expresi\u00f3n y que a d\u00eda de hoy han quedado descontextualizados. Porque si medieval resulta la existencia de un rey con protecci\u00f3n divino-legislativa, no lo es menos la endiablada red jur\u00eddica que ataca frontal y violentamente a la libertad de expresi\u00f3n. Recordemos el caso de Cassandra Vera, una tuitera que fue condenada en primera y segunda instancia por apolog\u00eda del terrorismo al publicar un chiste sobre el asesinato de Carrero Blanco, hombre fuerte del R\u00e9gimen franquista y mano derecha del dictador que es considerado por la legislaci\u00f3n espa\u00f1ola como v\u00edctima del terrorismo. \u00a1\u00bfV\u00edctima?!<\/p>\r\n Porque esta mencionada asimetr\u00eda legislativa en favor de las \u00e9lites franquistas dota de inmunidad al jefe del Estado y de libertad a la ultraderecha para campar a sus anchas<\/strong>, justo al contrario de lo que sucede en pa\u00edses como Alemania, donde la apolog\u00eda nazi se castiga con rigor. Por ello, en los mismos d\u00edas en los que Pablo Has\u00e9l ten\u00eda que entrar en prisi\u00f3n, una joven neonazi hija de un comentarista de Ana Rosa Quintana, presentadora ultra que dirige desde hace d\u00e9cadas un exitoso programa televisivo, fue noticia por un discurso de odio contra m\u00faltiples colectivos, entre ellos los jud\u00edos, en el centro de Madrid. Convirti\u00e9ndose autom\u00e1ticamente en musa de no pocos medios de comunicaci\u00f3n. Una iron\u00eda del destino, otra m\u00e1s, casi tan \u00e9pica como la que ha acaecido junto a Juan Carlos I, que se refugia en Emiratos \u00c1rabes Unidos al tiempo que una princesa, Latifa, denuncia encontrarse secuestrada. Una de tantas.<\/p>\r\n Los actos violentos, en la mayor\u00eda de los casos, aunque sean minoritarios, suelen reflejar las tensiones producidas por el desacuerdo ciudadano con el marco establecido por los pol\u00edticos en favor de las \u00e9lites. Ocurri\u00f3 en Catalunya, tanto en octubre de 2017 como de 2019, donde los disturbios no habr\u00edan existido si los catalanes hubieran podido votar en refer\u00e9ndum, una consulta que avala\u00a0una inmensa mayor\u00eda de ellos. Y ocurre en nuestros d\u00edas, donde si el jefe del Estado no fuera inviolable jur\u00eddicamente y hubieran sido despenalizadas hace tiempo una gran cantidad de delitos que afectan a la libertad de expresi\u00f3n, ni un rapero estar\u00eda en prisi\u00f3n ni habr\u00eda manifestaciones en las calles ni un\u00a0rey em\u00e9rito estar\u00eda huido para verg\u00fcenza internacional de Espa\u00f1a.<\/p>\r\n Esta intencionada posici\u00f3n pol\u00edtica, claramente favorable en Occidente a movimientos ultraderechistas, est\u00e1 generando en los \u00faltimos tiempos un problema que puede ser a\u00fan mayor: la privatizaci\u00f3n de la legislaci\u00f3n en cuanto a la libertad de expresi\u00f3n de las redes sociales. Un debate espinoso que no desaparecer\u00e1 por desatenderlo, muy al contrario, se acrecentar\u00e1. Porque lo cierto es que en la actualidad son empresas privadas como Facebook o Twitter las que tienen que tomar decisiones que, en ning\u00fan caso deber\u00edan ser de su competencia, sobre los l\u00edmites de la regulaci\u00f3n de la libertad de expresi\u00f3n. El cierre del perfil de Donald Trump tras el asalto al Capitolio es una muestra de ello. Y sin ir m\u00e1s lejos, el cierre de mi propio perfil de Twitter ayer mismo es otro.<\/p>\r\n